Giorgio se lleva una sorpresa cuando el intruso Fabrice salta sobre él por detrás con los ojos vendados y cinta adhesiva. En un segundo le quita la ropa interior y le ata los tobillos. Parece que al chico le va a gustar, cuando le da la vuelta a su cautivo la polla esta dura y mojada de pre, y solo se pone mas dura cuando Fabrice empieza a jugar con ese culo bronceado y rollizo. El frotamiento de la polla y la follada facial sin duda pone al chico en su lugar, pero una vez que Fabrice está clavando esa polla a pelo entre sus mejillas y lo utiliza como un juguete de el chico está gimiendo de placer. No hay nada que Giorgio pueda hacer al respecto, su culo está poseído y cremoso, el semen gotea de su dolorido coño. En el momento en que es ordeñado de su propia carga y dejó devastado su agresor se ha ido, pero probablemente va a estar de vuelta.